Columnas

La secta delincuencial y los traidores

«La Grilla en Rosa» de Fabio  (versión contra traidores)

Siempre he dicho que la secta oficialista se parece tanto a su creador que no pueden engañarse: esa creación de Ernesto Ze(r)dillo, el PRD y el cobarde Cuauhtémoc Cárdenas se hizo conocer a fuerza de ilegalidades.

Ya fuera poniendo a marchar a todo aquel tonto que se dejara para chantajear con lo que fuese, en sus llamadas «marchas por la democracia» cuando le ganaron la gubernatura de Tabasco y -oh, sorpresa- no lo reconoció y alegó fraude. Todo aquel idiota útil en su camino era puesto a caminar entre Tabasco y la Ciudad de México para ir a poner plantones en el Zócalo, siempre antes de fechas en las que se iba a necesitar libre el espacio público. ¿Solución del bruto Ze(r)dillo? Darle dinero, vía Marxelo Ebrard, para que se largara, al menos por un rato. Conseguido el chantaje, a ir a hacer otro, y así.

Una vez el pretexto de sus plantones fueron los trabajadores de limpia, como si en serio le importaran. La causa era lo de menos; el efecto era lo importante: dinero en efectivo para mantener al güevón macuspano, que ya se sintió líder. De ahí, tanto el cobarde Cárdenas como Ernesto Zedillo le dieron luz verde a que se lanzara como jefe de gobierno del DF sin cumplir el requisito de residencia legal en la ciudad.

Desde esa ilegalidad, su mesías se la ha llevado de transa en transa, y los haraganes que convence juran que tiene razón. Ya lo vimos ahora en las cámaras, convertidas en porquerizas guindas en las que los marranos de la secta se dieron baños, masajes y mascarillas en el estiércol de las reformas lesivas contra el Poder Judicial que el inepto pero narco y corrupto macuspano les exige como vendetta personal contra la SCJN.

No creo que haya maldición suficiente para los cuatro traidores que se volvieron contra sus partidos y votantes y se pasaron al lado oscuro. Tal vez hallemos alguna en Tailandia, a juzgar por lo malvado y pegajoso de los fantasmas de ese país. La muñeca fea michoacana Araceli Saucedo, El Woody platanero José Sabino Herrera y la parejita conformada por Corruptín y Corruptón Yunes merecen estar en la sección VIP de los traidores en los círculos infernales, condenados a ver las mañaneras por toda la eternidad mientras la Vilchismosa los lame con su lengua de víbora y la Chuchis Ramírez Cuevas los reboza de excretas de youtuber oficialista.

Estos cuatro malditos le dieron lo que querían al mesías, a cambio de promesas que fácilmente pueden incumplirse: a Corruptín y Corruptón, que ya no haya pepe con sus antecedentes y juicios pendientes y en curso, para ellos y sus familiares; a la congruente michoacana, ni más ni menos que hacerla gobernadora del estado creador de tantos cárteles como variedades de aguacate, idea que los ilusos del PRD local se creen a pie juntillas y por la que ya ladran su apoyo al mamotreto que acabará con el país; al Woody platanero no queda claro qué le prometieron; tal vez alguna yegua de ojos coquetos como «La Canica», amor de juventud de las calenturas del mesías -investiguen eso, en serio se van a divertir con el pasaje de zoofilia del Iluminado-.

Desde antes de las elecciones, durante y después, no ha habido nada que la secta haya obtenido legalmente. Nada. No las elecciones, que fueron un fraude monumental en el que inventaron 20 millones de votos de 2021 a 2024 a favor del peor gobierno de la historia; la marioneta Pascualita Sheinbaum Rubio nunca celebró que dizque ganó, y es hora que sus «ideas» y «agenda» no se ven por ningún lado, pues sigue pegada a su papel de marioneta que repite palabra por palabra lo que diga su marionetista sin moverle ni el tiple tabasqueño.

Tampoco es legal la mayoría calificada que tuvieron en San Lázaro alterando los resultados y victorias electorales, a ciencia y paciencia de cualquier autoridad; menos en el Senado, donde fueron tan notorios los cuatro traidores. Por tanto, cada decisión que se tome de parte de este mazacote de gobierno es tan ilegal como lo que le dio origen.

¿Ya mencioné que el galán otoñal de albañal que regala jirafas se portó más como un capo de la mafia para obtener los votos que buscaba? Sin quitar lo cobarde y traidor de Corruptín y Corruptón, todos dieron la agachada de «cóbrate si te debo» ante los calientes oficialistas.

Hasta la muñeca sexual derretida, Layda Sansores, puso su parte deteniendo a otro senador en Campeche, para impedirle votar. Este jotito, de nombre Daniel Barreda, luego luego se dobló y de Movimiento Ciudadano se pasó al verde a la velocidad del Peje robando dinero.

Si bien el proceso aún no acaba y Norma Piña y compañía son nuestra esperanza de una remontada histórica ante el autoritarismo, desde esta desanimada tribuna se ve muy redondo pa’ huevo y muy ojón para paloma que el mil veces maldito mesías no se salga con la suya con el concurso de su secta y los traidores que se requieran para destruir el Poder Judicial.

Piensa, ¡oh, Patria querida!, que el Cielo, un traidor en cada hijo te dio. Los menos, pero más nocivos y corruptos, los morenarcos. La mayoría, los mexicanitos con su abulia ante la destrucción del suelo que los vio nacer.

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