Columnas

Títere de complejos y pleitos gratis

«La Grilla en Rosa» de Fabio  (versión que no tiene mayor reclamo con España que la pésima voz de Julio Iglesias)

Todavía ni siquiera asume el puesto que le consiguieron mediante el fraude electoral más grande de la historia del país y la marioneta ya está causando problemas con otros países, al comprar las taras del mesías y la no primera dama contra España.

Como recordarán, desde hace años el mejor presidente del crimen organizado ha estado fregando 24 horas al día y un ratito más en la noche con que España debe «disculparse» por la Conquista y los abusos contra los indígenas. La idea ni siquiera fue del mesías, sino de la primera inútil de la Nación, la no escritora, no investigadora, no culta, no dama Beatriz Gutiérrez Müller, quien solía ser quien le calentaba el coco a su impotente marido con temas que a ella le interesaba alborotar.

Pues bien (no, ‘pérenme: pues mal es más correcto): la marioneta no invitó al Rey de España a la simulación de relevo presidencial que será su toma pitera de posesión -todos sabemos que no hay tal, que seguirá desgobernando su amo- pero sí a su jefe de gobierno, un bruto comunistoide llamado Pedro Sánchez.

Sucede que la constitución española marca muy clarito que el mero mero del gobierno de ese país es el Rey, no su gato de gobierno. Por tanto, la grosería se la hicieron al gobierno español en pleno, no al Felipe VI en particular.

Ah, pero es que la nena se tenía que asumir como la vengadora del honor del mesías. Este miércoles, en una carta llena de errores garrafales, como decir que la capital azteca Tenochtitlan se fundó hace 200 años,, se «justificó», so to say, diciendo que al Rey lo consideraron elemento gacho por no responder a una atenta cartita llena de pendejadas de AMLO respecto a las tan exigidas «disculpas» de España a México por la Conquista, misma que el soberano peninsular sencillamente no peló ni respondió.

El detalle: la tal carta es de 2019.

Ya saben la clase de acomplejado vengativo que es su Alteza Pejemísima, y hasta ahora estuvo cocinando el modo de desairar al Rey por no contestar su misiva babosa. Lo increíble es que la «doctora», la «científica», la todas mías de la ciencia, repita las mismas estupideces y apoye las vengancitas de su creador con los que le caen gorditos.

El problema se lo crean al país, no al panzón macuspano ni a su reseca sirvienta. España es uno de los países que más invierte en este pedazo de subdesarrollo, cosa que gustosos van a dejar de hacer gracias a Pinchi y Cerebro.

Otro simpático detallito: para algunos, por ejemplo, el caricaturista Helguera del Diario Oficial «La Jornada», el mesías es una eminencia en historia, cuya sapiencia es tanta que hay que escucharlo con reverencia y con un pañal puesto. «Es un hombre muy brillante (nota del redactor: jajajajajaja) y con un conocimiento de historia de México que te cagas», dijo Helguera en una entrevista para «El País», cuando él y su grupito de moneros vendidos fueron a tragar gratis a Palacio Nacional.

Pues la eminencia debería hacerle menos caso a su vieja y a su hígado con eso de las disculpas españolas. Sucede que España ofreció ya disculpas de manera oficial a la Nación: lo hizo en 1836, con el “Tratado Definitivo de Paz y Amistad entre la República Mexicana y S.M.C. la Reina Gobernadora de España”, firmado entre México y la Reina Isabel II.

La parte medular del tratado, también conocido como Tratado de Calatrava, dice: ‘Olvidar para siempre las pasadas diferencias y disensiones, por las cuales desgraciadamente han estado tanto tiempo interrumpidas las relaciones de amistad y buena armonía entre ambos pueblos’, además de que promovió una amnistía que abarcó los mismo españoles que mexicanos.

¿Queda alguien que crea que la Sheinbaum -jamás le voy a llamar presidente a la hija del fraude electoral de estado que sólo está en nombre de su manejador en la silla- va a distanciarse y gobernar mejor que el anciano que jamás se disculpa?

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