«La Grilla en Rosa» de Fabio (versión que aborrece a los zalameros)
Parece que lo único que quiere probar fuera de toda duda es que no tiene independencia, ideas propias ni ganas de quitarse el mote de marioneta que con garbo pasea por todos lados, terciado a su reseca figura.
La no-científica no ha hecho nada, y recalco, nada, que la aparte siquiera poquito del autor de Pesadilla en la Patria del Infierno, Pejy Kruger. Al contrario: Sheinbaum muestra cada día lo arrastrada que puede ser con tal de quedar bien con el galán de «La Canica» -para entender este punto, busquen «Canica» y AMLO en internet, lo que los llevará a los graciosos antecedentes del mesías en sus mocedades tropicales-.
La reseca nos salió con la propuestaza de que hay que declarar el 1 de julio como día conmemorativo nacional, porque… ese día su ídolito, creador, Frankestein, padrote político y titiritero ganó la presidencia.
Antes que conmemorar, ese día debe estar marcado como luto nacional. Pero a doña Reseca se le hace la onda que de plano empiece el culto a la personalidad (¿cuál?) de su sociópata de cabecera, y qué mejor que regalar a los mexicanitos un día de güeva a cuenta de que un 1 de julio comenzó la metástasis de dictadura ignorante en nuestro país.
El mexicanito, güevón como es, aceptaría de mil amores «celebrar» el día del iIuminado tirando la web y rascándose a Juanito y a Juanín muy agustito.
En la prueba de lanzamiento de dignidad de las olimpíadas de la zalamería que se organizó la Sheinbaum solita, logró record galáctico, ya no mundial, al decir que ella jamás -nótese el enfático «jamás»- pintaría su raya con su titiritero, porque (vamos a la parte científica de la reseca) eso equivaldría a pintar su raya con el «pueblo», whatever that means.
Aunque, si ya le vamos entendiendo al dialecto cuatroteto-español, el «pueblo» es la encarnación de la voluntad del mesías, y el mesías es el relaciones públicas del «pueblo»; por lo que aplicamos un poco de silogismos llegamos a la conclusión de que voluntad popular=pueblo=voluntad del macuspano=AMLO, y así el «pueblo» es el macuspano, y tejones porque no hay liebres. Se hace la voluntad del «pueblo» porque da la purititita casualidad que él es el «pueblo».
Más zalamerías: ¿que el creador ataca al Poder Judicial? La titina opina exactamente lo mismo, palabra por palabra. ¿Que los otros datos de la desbordada violencia del narco, tan aplaudida por el mesías? La marioneta se despelleja las pellejudas manos aplaudiendo a su manejador, quien a base de puras mentiras compone la situación sangrienta del país.
La batería de contrarreformas que el mesías quiere tiraron en menos de una semana la paridad peso-dólar, y la reafirmación de la dócil muñequita de que las va a imponer al pie de la letra le dieron otros empujones hacia abajo al peso. Ordena y obedezco, oh, Amo y Señor, que si tú haces todo mal, vengo yo y lo hago aún peor.
Nada, nada, nada, y repito, nada, de lo que ha exhibido la Sheinbaum demuestra lo que algunos ilusos ansiosamente quieren ver: a alguien aunque sea ligeramente moderada y saliéndose del guión del Tomasito Garrido Canabal revolcado en complejos al que sirve de manera tan abyecta.
Aquí sólo ha habido espacio para la zalamería más ramplona. No hay científica, como nunca hubo un demócrata. Si no se tiene a una marioneta en presidencia, ¿entonces para qué pelear tanto por imponer el maximato?
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