«La Grilla en Rosa» de Fabio (versión boxística)
Lo que es la inspiración: el título salió muy práctico para describir cualquier cosa del país que quedó a cargo del partido-secta: de la manera más tonta e ilógica, a fuerza de fraudes electorales, los ladrones quedaron a cargo de la riqueza del país, de su democracia, de sus libertades.
En este caso particular, me referiré a la presidencia de la Mesa Directiva del Senado de lo que queda de la República. Sólo a un imbécil se le podría haber ocurrido poner en tan delicado puesto, que requiere de alguien que en teoría debe ser preparado y ecuánime, al insoportable y agresivo Gerardo Fernández Noroña, quien contaminó de partidismo y hostilidad un puesto que se supone debe ser completamente imparcial.
Bueno, pues el imbécil que lo puso, cierto cerdo macuspano de cuyo nombre no quiero acordarme, puede estar más que satisfecho del año que la silla principal del Senado estuvo ocupada por un mojón machista, gritón, ofensivo, corrupto, agresivo y muy, pero muy cobarde. ¿Resultado? Hartó a los opositores y por eso Alejandro «Alito» Moreno, le puso una madriza que desde hace mucho alguien debió ponerle al Noroñas.
Alito demostró lo que todos intuíamos: que Noroñita es puro gritón y un perfecto cobarde a la hora de ponerle Jorge al niño. ¿Y qué llevó a que el Senado se convirtiera en la Arena México por un ratito? Las constantes agresiones verbales de Noroñas a Lilly Téllez, quien sólo expresa lo que queremos millones de mexicanos hartos de los narcos: que ante la inacción y franca complicidad de AMLO y su sirvientA con los cárteles, los Rambos gabachos ayuden a este país a disponer de los capos para convertirlos en abono de panteón.
Según los morenarcos, que traen extraviada la brújula moral, pedir ayuda (la misma que a fuerza pide la sirvientA a Trump) a las agencias de EU para que hagan lo que el Ejército y la Marina no hacen, combatir con todo al narcoterrorismo, es «traición a la Patria».
Recordemos que los guindas son muy hocicones y para todo sueltan que uno es «traidor a la Patria», excepto contra ellos, quienes por servir y alabar al ya mencionado imbécil para instalar su versión mexicana de la dictadura cubana en asociación con los cárteles, son los verdaderos traidores a mi Nación.
Pues bien, tras estar insultando en todos los tonos y callando a los opositores, Alito le reclamó que no lo dejara hablar, lo que el divo de la mugre pretendió ignorar. Empujó primero a Alito (aunque varios periodistas «serios» y diarios como «Reforma» afirmaran lo contrario), pero el campechano con unos empujones y media bofetada lo hizo correr escondido detrás de la vieja corriente llamada Dolores Padierna. La cara de pavor de Noroñas es evidente en los videos.
¿No que muy salsa? Casi llora el bocón. Ya luego salió a contar un pleito que no existió: que el fue la víctima y que qué bueno que lo detuvieron porque iba a hacer chilpachole con Alito.
Mención aparte merece un achichincle de Noroñas, quien con un empujón leve de Alito fue a dar al suelo. Ya luego se presentó con vendajes falsos como si se hubiera enfrentado contra una manada de elefantes. El sujeto de verde quedó más en ridículo que su jefe, pues un chaparrito lo mandó a besar la duela casi con una mano.
Al final, Lloroña salió a mojar pañuelos con sus dolidas lágrimas porque le pusieron una tunda desde hace mucho merecida. Furiosa la nena, dijo que quiere que desaforen a Alito y a otros dos senadores del PRI por «montoneros». Y pese a dejar claro que lo suyo es gritar pero se muere de hambre como boxeador, todavía se puso a retar a Federico Döring, del PAN, el 1 de septiembre. Ya sabemos el día en que le van a volver a dar una golpiza que Noroñas pide desesperadamente.
Alito ha de pensar que de saber que iba a revivir al PRI poniéndole su estate quieto a Noroñas, desde cuando lo habría sonajeado. No se olvida quién es Alito, pero por ahora es héroe de la oposición.
LAS CUENTAS DE LA LECHERA
A la resecA le brillaron los ojitos al escuchar que Estados Unidos va por 15 mil millones de dólares de activos del «Mayo» Zambada. La Primera Encía de la Nación se cree que le van a dar parte del botín que se le confisque al delincuente sinaloense.
Urgida como está de dinero, porque su amo se acabó todos los fondos posibles, y ésta nos está endeudado a doscientos kilómetros por hora diario, pensar en tener la lana de Zambada para seguir comprando los votos de la secta vía «becas», «apoyos» y «pensiones», parece una gran idea.
El problemita es que el narcote tenía todo en inversiones, no en billetes en efectivo, como la morenarcada quisiera. De la fortuna del «Chapo» Guzmán, un poco menor a la de «El Mayo», muy poco se recuperó en billetes, se acuerdo a las autoridades gringas.
De modo que, si es pasión, que se te olvide, Cheinbaum.
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