Columnas

De serviles y ser viles

«La Grilla en Rosa» de Fabio  (versión a la que el Peje no le da línea como a Zaldívar)

SERVILES

Ya había mencionado en esta columneja, que luego suele ser medio saurina y adivina de las desgracias por venir, que el mesías tiene por costumbre soltar en confesiones no pedidas los delitos que comete con la gracia de un elefante haciendo castillos de arena. Armar un caso penal meritorio de cárcel, más bien, cientos, en contra del destructor de México va a estar fácil: todo está en el circo diario, de boca del perpetrador.

Pues ayer, el inhumanista mexicano que se suelta dos de sus confesiones que traen etiqueta de «directito a Almoloya»: Una, la que más escándalo causó, en la que sin la menor vergüenza confesó como el arrastrado ex ministro de la Suprema Tremenda Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, recibía órdenes de parte del ignorante macuspano para resolver o no resolver a conveniencia diversos casos.

La segunda: que sabiendo la disputa de poder, con asesinatos y demás delitos, de parte de los cárteles de narco en Guerrero, permitió que uno de esos grupos tomara la capital de Guerrero, Chilpancingo.

¿Necesitan algo más para alarmarse con las acciones del vejete criminal que no gobierna el país por andar en plena campaña, o necesitan que de plano mate a alguien en vivo para convencerse de que es un sociópata?

Hay toda una reglamentación que dice la cantidad de delitos que se cometen y las penas a las que se hace acreedor alguien que invade las atribuciones de cualquiera de los Poderes de la Unión, en este caso, tener al ministro presidente de la Suprema Tremenda Corte como tu chacha, con toda la complacencia de su parte, dicho sea de paso. Manolín y Zaldovarinsky merecen cárcel por partes iguales.

Pero no: ya ven que esta tierra pródiga premia a patanes como estos con la impunidad made in México que es más resistente que el acento chilango, que no lo quita casi nada.

El cacarizo Zaldívar anda este jueves como pollo descabezado tratando de negar que el mesías le diera línea y le tronara los dedos para que lo obedeciera, algo que hacía ya que se quitaba de ser tapete y se regresaba a su oficina. Nadie, por supuesto, cree su versión, la que de paso deja de mentiroso al que confesó que así era. ¡Changos, monos y gorilas!: aparte de arrastrado, estúpido el Arturito.

Sobre el segundo tema: quiero que busquen por todos lados, de pies a cabeza, en la historia de los sexenios desde el imbécil Luis Echeverría, el corruptísimo José López Portillo, el lelo Miguel de la Madrid, el trácala Carlos Salinas de Gortari, el zonzo Ernesto Zerdillo, el babas mandilón Vicente Fox, el enojón Felipe Calderón y en el del burro Enrique Peña Nieto, una sola declaración de ellos, una, en la que reconozcan urbi et orbi haber entregado una ciudad para que la controlen los narcos.

Como si fuera chiste, así lo confesó el multicitado. Al cabo ninguno de sus tres rateros hijos mayores o parientes conocidos viven en Chilpancingo y el malhecho Chocoflan está en exilio dorado en Londres, afinando las mañas por las que papito Peje lo sacó del ojo público: escandaloso, fumador y chupador. Por eso, que se jodan los guerrerenses. Querían Morena pese a todas las advertencias, ¿no?

Si Guerrero está como está es porque lo desgobierna un violador narco, borracho y bravero, Félix Salgado Macedonio, por medio de su Juanita Evelyn.

A este caos hay que sumarle que la Fiscal de ese estado de desastre renunció. ¿Saben por qué? Porque le exigieron desde el Palacio Nacional de Mordor que ¡cerrara los casos de violación en contra del penepáusico Félix Salgado Macedonio! Sandra Luz Valdovinos Salmerón se fue antes que prestarse a eso, a tener que rendirle cuentas a Salgado Macedonio en vez de a la Juanita y a tener qué decirle antes a él dónde y cuándo eran los operativos de seguridad contra el narco.

Total: como en ninguna de las masacres recientes en Guerrero han matado a ningún pariente de AMLO o del violador Salgado, que los narcos hagan lo que quieran mientras los curas tratan de poner un poco de paz y orden.

El sangriento y vergonzoso servilismo del narcopresidente y sus minions con los cárteles…

SER VILES

En serio que nomás faltó Chabelo para sacar los premios y las espantosas equis. La supuesta elección de impresentables del partido oficial a diputados, senadores y plurinominales dio una lista de nombres en la que no se sabe si votar por ellos o presentar mejor una demanda penal por todos sus delitos.

Échenle: entre los «elegidos» por la tómbola seleccionadora para habitar Grillindor en el siguiente sexenio están nombres como Ramiro López Obrador, pejehermano del mesías corrupto; el hijo del narcogobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal; valores juveniles Barcadí como el galán otoñal que regala jirafas, Adán Augusto López; el arrastrado Marxelo Ebrard; el arrastrado Nada llamado Ricardo Monreal; el ex novio de Carlos Monsiváis y Goebbelscito de la mañanera, Jesús Ramírez Cuevas; y uno especialmente ofensivo: el chayicaturista Rafael Barajas «El Fisgón» como senador plurinominal.

Recordemos que este vendido era muy bravo cuando era oposición y que ya con su ídolo en el poder se convirtió en «asesor» directo del presidentito, beneficiario del programa «Chayote del Bienestar» en su revistucha «El Chamuco y los Hijos del Averno» vía contratos millonarios de publicidad oficial; «conductor» de programas que nadie ve en Canal 11 del IPN, con sueldo mensual de hasta 160 mil pesos mensuales por ellos y beneficiario de contratos con el gobierno para otras chambas, todos por adjudicación directísima. Una vergüenza para el gremio, que además es, para decirlo bien, un hijo de la chingada que se burló de los padeceres y dolores de los niños con cáncer y sus padres, junto al Doctor Muerte Hugo López-Gatell, a quien por cierto no le dieron hueso que lo proteja de las varias demandas por su mortal gestión de la pandemia de covid que costó la vida a más de 800 mil mexicanos.

Otro al que le dan boleto VIP para seguir fingiendo que es pueblo pero viaja en primera y siempre al Primer Mundo es al mugroso porro Gerardo Fernández Noroña; a la adiposa Citlalli Hernández, actual secretaria del congal oficialista y el corruptísimo «líder» minero Napoleón Gómez Urrutia.

Un encanto de candidatos, ¿verdad? Yo lo que veo es la vieja práctica de seguir premiando a cuates, familiares y leales.

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