Política en Movimiento/Angélica Beltrán
México, a 31 de marzo de 2016 (Noticias México).- Al interior del PRD la crispación se agudiza no sólo por la contradicción que muestran sus miembros en cuanto al discurso y las acciones, como los diputados locales perredistas en el estado de México que votaron a favor de la llamada Ley Atenco, que abre amplias posibilidades al Ejecutivo Estatal para decretar, de manera absoluta, el estado de sitio si así lo considera, lo cual viola flagrantemente las garantías individuales.
Sino también por el movimiento Galileos que impulsa el nayarita Guadalupe Acosta y que ha comenzado a tomar fuerza, ahora que públicamente desconoció al candidato del PRD al gobierno de Chihuahua, Jaime Beltrán del Río e insiste en postular la candidatura del senador panista Javier Corral.
Lo cual no sólo contraviene la decisión del CEN, sino que deja mal parado al partido, por lo que el presidente Agustín Basave ha llamado a cuentas a Guadalupe Acosta y a los diputados locales mexiquenses, pues sus acciones escandalizan al partido y desprestigiar su imagen en vísperas de las elecciones para renovar 12 gubernaturas el próximo 5 de junio.
Y es que las acciones de estos grupos al interior muestran que el partido de la Revolución Democrática ni es democrático, porque no escuchó voces para elegir al candidato chihuahuense; ni es de oposición, ya que en Chihuahua el elegido es comparsa del PRI, como lo han demostrado ampliamente los Galileos.
En cuanto a los diputados mexiquenses perredistas, éstos ya dejaron ver que la ideología vale menos que los “cañonazos millonarios” que recibieron posiblemente de homólogos priistas en el Congreso local, como ha sugerido el líder de la corriente Nueva Izquierda y presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano. Lo cual suma un desprestigio más al partido.
Camachistas contra Beltronistas
Pero no sólo en el PRD se cuecen habas; el PRI de la Cámara de Diputados que coordina el mexiquense César Camacho, muestra animadversión contra los diputados afines, allegados o esencialmente Beltronistas.
Y en ese caso, la representante mayor de ese grupo no es otra que la propia hija del ex gobernador, Manlio Fabio, la diputada Sylvana Beltrones Sánchez, quien se ha visto marginada entre los camachistas, quienes además han frenado sus posibilidades de desarrollo como legisladora.
De principio se le negó presidir alguna Comisión legislativa, y a fuerza del golpeteo político se abrió el Grupo de Trabajo para dar seguimiento al caso ABC, para que lo presidiera Sylvana Beltrones, como una concesión al margen de las comisiones, que cede el coordinador César Camacho a beltronistas en esta 63 legislatura.
Un logro menor si se quiere, pero un reflejo de que en el PRI las fuerzas opuestas al interior, la del grupo mexiquense y la de Beltrones siguen en choque, y aunque los escándalos no se dejan escuchar, es notoria la marginación con que el grupo de César Camacho mantiene a la sonorense beltronista, que ni el saludo le extiende cuando de actos públicos se trata, como en la reunión de cenopistas, el martes de esta semana en San Lázaro, a la que acudió la dirigente de la CNOP, Cristina Díaz.
En estas circunstancias el grupo Beltronista en la Cámara de Diputados se mantiene marginado, pero discreto para evitar escándalos, que políticamente les han costado muy caros a los priistas.
Disciplina y orden muestra el PRI; no así el PRD al interior, pero para el caso da lo mismo. Entre sí, ni los partidos políticos son capaces de llegar a acuerdos o hacer valer la democracia, priva el autoritarismo de los grupos que llevan las riendas de su partido en cada etapa. En el caso del tricolor, hoy los mexiquenses someten al resto de los priistas y la Cámara de Diputados es ejemplo de ello.
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