El extraditado 30

«La Grilla en Rosa» de Fabio  (versión que pide 30 cadenas perpetuas para el mesias)

29 capos fueron entregados, y fue la nota del día de ayer, de hoy y de un tiempito antes de que a Trumpy, alias el Motherfucker in Chief, quiera más aún, que esta vez son los narcopolíticos, es decir, a los que permitieron a los cárteles moverse como Pedro por su casa en México.

No hay gobierno que se salve de la quema. Todos le entraron, en menor o mayor medida, a hacer tratos con la narcada, pero sin embargo había combate, había decomisos, había detenciones. Sólo con un ‘político’, sólo uno, se permitió la total impunidad para los criminales: su santo patrón San Güevón de Macuspana, protector de los señalamientos difíciles y milagrosísimo santito que regala país para hacer lo que se te hinche la gana.

Descarado, cínico, mentiroso, abusivo, autoritario, y todo eso en servicio de los capos; claro, a cambio de una lana siempre en efectivo, para cerrar sus tratos de impunidad con sus cuates los criminales.

Nadie le ha hecho tantísimo daño al país, ya sea robándolo, saqueando sus cuentas, dividiendo a la población y convirtiendo a muchos en dóciles zombies cachadinero, que llega con el difícil trámite de besarle los microdídimos al que se siente ungido y protagonista de una misión única en la Tierra, según los alucines de su despreciable madre, Manuela Obrador.

Tras la ofrenda de 29 peces ya no tan gordos, a Trumpy se le antoja todavía más la marisquería mexicana, ahora con los políticos que aceitaban la maquinaria de complicidad para que el $ol saliera para todos. Ahí tenemos la misión a la que está destinado el Peje: ser el primer ex presidente mexicano en ser juzgado por pinche mil crímenes junto al narco, causante de la inaceptable impunidad de los sicarios que regaron el país de cientos de miles de cuerpos de culpables e inocentes.

Los Estados Unidos se pueden agarrar de la negativa del mesías a cooperar para combatir a los narcos, de cómo sacó a la DEA de México; de todas sus visitas a Badiraguato, la zalamería con el «Chapo» Guzmán y toda su familia; sus delitos confesados en sus choros mañaneros, como liberar al hijo del Chapo, su permisividad a los criminales al prohibir al Ejército atacar a los delincuentes, y kilos y kilos de pruebas inculpatorias más.

Ya no hablemos de su criminal manejo de la pandemia, que costó la vida a 860 mil mexicanos que no debieron morir, pero fallecieron porque el macuspano y su escudero Hugo López-Gatell se negaron a comprar pruebas de detección y vacunas; politizaron la inoculación, y negaron atención a médicos privados y a otros sectores porque así se los dictó su ideología. Tan sólo los muertos que causó en la pandemia le merecen todos los infiernos a AMLO.

Por eso, lo que empezó como un meme se empezó a popularizar. La fotocomposición de los 29 rostros de los capos extraditados tiene un espacio, el número 30, y pronto el ingenio mexicano lo llenó con la cara del narcuspano. «El número 30», le pusieron de inmediato.

Y tienen razón: falta ese capo número 30. Más que capo fue un sirviente, pero uno lo suficientemente nocivo como para envenenar la relación bilateral México-EU.

Busque en Twitter «número 30», y verá que no le miento. Algunos fanáticos de la secta trataron de hacer la misma broma pero con el odiado Felipe Calderón, pero a los pobres chairitos nadie les hizo caso. En cambio, abundan las referencias al mesías en diferentes ilustraciones que lo suponen ya preso.

Podrán ofrecer ahora a Rocha Moya, a Mario Rana Violada Delgado, y a todo Morena, pero está claro que Trumpy, el nazi antimexicano, ve sólo un culpable, y lo tiene claro: a Juan Trump, su modo de llamar a AMLO.

Vengan: llévense al extraditado 30. Nadie lo merece más que él.

BUSCANDO DISTRACTORES

Ya asentado el polvo de la entrega de Caro Quintero y compañía, a la resecA le quedó la chamba de tapar la clara doblada que le metieron para que llevara a cabo tal entrega de delincuentes, y la arrugada favorita del profesor se puso a tirarle y a echarle la culpa de todo a España, a las patas de Cuauhtémoc y su ejecución en Honduras hace cinco siglos; a la Suprema Corte y la versión falsa de que iba a liberar a la mayoría de los capos enviados a EU.

Lo malo de pensar es que nadie, hasta el más obtuso, pudo dejar de ver cómo a fuerzas hicieron cumplir al gobierno de la resecA a extraditar a la pandilla de hijos de perra que se enviaron ayer a suelo estadounidense.

Que diga lo que quiera, pero es obvio que nadie la respeta, nadie serio la ve como presidentE, y nadie cree ni por un segundo que es la que gobierna.

ADIÓS AL ARGUMENTO DEL «MAYO»

El principal argumento del «Mayo» Zambada, que lo sacaron ilegalmente del país para entregarlo a los gringos, se acaba de caer gacho con el «Paquetextradites».

Varios de los reputados HDP que ya están en manos de Trump tenían juicios, trapacerías, amparos y toda clase de tretas para dilatar o evitar ser extraditados, y todo eso valió madre este jueves, cuando se los llevaron sin que todas sus maniobras legaloides importaran.

¿Cómo pueden ahora exigir contra una extradición ilegal si hicieron 29 de fregadazo en un día?

Jaque mate. Zambada, allá te quedas.

Twitter: twitter.com/Fabiocarton

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