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Los sombreros ajenos y el depa de mi general el Chencho

«La Grilla en Rosa» de Fabio.  (versión que se cuelga de victorias ajenas)

Hay consenso nacional en que Ana Gabriela Guevara mutó a Ana Ratera Guevara desde que entró en contacto con el mesías y sus píldoras de corruptocilina.

De deportista destacada, ganadora de medallas en las pistas internacionales cuyas competencias detenían al país para verla ganar, que se quejaba del poco o nulo apoyo a los deportistas amateur, de los dirigentes corruptos y todo lo malo del deporte nacional y que decía que con ella al frente del deporte los apoyos lloverían, pasó a ser una miserable corrupta que no ha podido explicar qué hace con los millones destinados a los atletas pero que no llegan a ellos. Le calculan unos 400 millones que no ha sabido explicar.

Todo, claro, es siguiendo las altas indicaciones del miserable mayor de resecar todo y a todos los presupuestos con tal de comprar votos (el mesías no tiene la lana del petróleo que tenía el inventor del truquito electorero, Hugo Chávez), y como resultado, los atletas se ven orillados a vender y ofrecer lo que sea con tal de reunir el dinero necesario para preparación, competencias y viajes, además de buscar apoyos en donde sea, menos con Anita la Raterita, quien tiene un letrero en la puerta que dice «hoy no apoyo, mañana sí».

Cuando los triunfos llegan, sin embargo, los cínicos gubernamentales, empezando por el Iluminado, son los primeros en felicitarlos y colgarse sus medallas. Tal fue el caso de la selección mexicana de natación artística, que en la Copa Mundial de la especialidad que se celebró en Egipto, ganó tres medallas de oro y una de bronce. Con la primera, de inmediato el mesías y su desgobierno publicaron felicitaciones, que se ganaron de inmediato la repulsa del público, por oportunistas y desvergonzadas.

Pero caravanear con medalla ajena (valga la paráfrasis) no es lo único que hace el desgobierno: también apoyan a la dictadura cubana -el ideal de desgobierno del dictadorcito platanero- con 8 mil tabletas electrónicas para «modernización» del censo de cubanos esclavizados. Eso mientras que las órdenes acá han sido acabar con compras de nuevo equipo, compra de licencias para programas indispensables y nada de pago de antivirus cibernéticos, cosas que permitieron el famoso hackeo de los archivos de la SEDENA por el llamado grupo Guacamaya, que tantas corruptelas han revelado.

Lo curioso es cómo anunciaron el «apoyo»: «México apoya a Cuba con 8 mil tablets». ¿México? ¿A quién de nosotros nos preguntaron si nos parecía bien regalarle todo eso al corrupto y mantenido gobierno cubano? Fue por decisión de uno, y sólo de un imbécil, ese que está obnubilado con que su regimencito dictatorial sea igualito al de la isla.

A los mexicanos no los apoya -si no es para comprarles el voto-, y mientras el mesías anda muy disparador con los dictadores cubanos. Que al cabo el dinero no es suyo.

MÁS TRANSAS DEL MI GENERAL EL CHENCHO

La ya más que escandalosa gestión del general comprado Crescencio Sandoval, el Chencho acá entre cuates, tiene una nueva raya en su militarizado tigre. Ser viajero de lujo con todo y su familia en destinos y hoteles carísimos se lo perdonó (pero cómo no) el mesías sin meterse siquiera a investigar lo cierto que resultaron las acusaciones en contra del cacarizo generalito. Ahora, y otra vez vía Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, nos enteramos que Chenchín se compró un departamento bien chido en una zona de alto pedorraje (de los más altos) y que se lo dio como ganga una empresa.

Tal transacción no tendría nada de raro de no ser por la empresa y el precio. La compañía en cuestión es contratista de la SEDENA, que le dio al menos un contrato de 300 millones de pesos, transacciones hechas al estilo de este sexenio, sin la menor transparencia. Y andavete que después de ese contratote, la tal empresa le vende a mi General el Chencho un departamento de 30 millones de pesos, pero a precio compitas, por ello se lo dejaron a apenas 9 millones de morlacos, de los que Chenchín ya pagó más de seis.

La cosa es que el sueldo oficial de Chenchín, 172 mil varos al mes menos impuestos -casi 50 mil pesos-, no da no para los gastos de sus viajes de lujo ni para comprar el departamentito de lujo, por lo que las sospechas se hacen más sospechosamente sospechisistas acerca de dónde ha salido el varo para pagar la vida tan a toda madre que Chenchín se está dando junto con toda su perrada.

No cabe duda que el mesías sí hace milagros. Pero nada más entre su familia y sus arrastrados más leales. A la selección resto del mundo que se la cargue el payaso.

EL PREMIO DE LA MINISTRA

La Ministra Presidenta de la Suprema Tremenda Corte, Norma Piña, fue galardonada en Marruecos con el Premio Derechos Humanos 2023, entregado por la Asociación Internacional de Mujeres Juezas (IAWJ).

Es curioso cómo, mientras aquí el desgobierno tiene en marcha una campaña de desprestigio y de odio contra los ministros de la SCJN por haberle tirado su ofensiva idiota contra el INE, llegando a la descalificación personal (como eso de que el premio se lo falsificaron en el centro de la CDMX), allá celebraron la valentía de la ministra y advirtieron de la tormenta que enfrenta.

Más porque por lo malhecho de las ocurrencias legislativas del partido Morenarco, la SCJN va a seguir haciendo tiradero de las «iniciativas» del mesías. Se le augura un hígado muy hinchadito los siguientes meses. Vamos, cirrosis, tú puedes.

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